¡Conocer nuestro cuerpo es muy importante! De la misma manera que observamos nuestras pecas en la piel u otros cambios en el cuerpo, también hay que prestar especial atención a nuestro pecho a través de la autoexploración mamaria. ¿Sabes en qué consiste? En palpar los pechos para estar atentas ante cualquier signo sospechoso que tenga que ser valorado por un profesional.
Es conveniente saber el momento adecuado, los pasos para hacerlo correctamente y los aspectos fundamentales a revisar. Con motivo del Día Mundial del Cáncer de Mama, que se celebra el 19 de octubre, queremos compartir con vosotr@s los pasos y métodos necesarios para la autoexploración.
Métodos de palpación
Este autoexamen mamario se recomienda una vez al mes, y no debe coincidir con la menstruación, incluso es preferible que hayan pasado más de 48 horas desde que terminó el periodo. En el caso de menopausia, se puede realizar cualquier día.
Debemos saber qué aspectos debemos notar en la palpación de las mamas:
- Aspecto. Los pechos deben ser parecidos, aunque uno puede ser algo más pequeño que el otro.
- Movimiento de los pechos. Tienen que subir del mismo modo, conservar la silueta circular y no aparecer vacíos ni anomalías en la forma.
- Piel. Debe ser lisa y no rugosa.
- Pezón y areola. No debe haber cortezas, enrojecimientos, hundimientos ni flujos repentinos.
Pasos para la autoexploración
Te explicamos cómo hacerlo en casa delante de un espejo:
- Brazos arriba. Sube los brazos, y en esta posición, comprueba que no existan hundimientos, pliegues, rugosidades, etc. En definitiva, se trata de comprobar que no existen irregularidades ni líquidos anómalos.
- Manos en la cintura. Baja los brazos y sitúa una mano en cada lado de la cintura. Así, ejercemos presión en la parte de la cadera con las manos y, al mismo tiempo, metemos el pecho para adentro con ayuda de los hombros y los codos, realizando una inclinación hacia el espejo. De este modo se realizan los cambios en el contorno de las mamas.
- Tocar y presionar el pecho derecho. Levanta el brazo derecho, coloca los dedos de la mano izquierda en el pecho derecho y presiona ligeramente, realizando círculos en espiral en el sentido de las agujas del reloj, de adentro hacia fuera. ¡Presta atención a cualquier punto que te genere molestias!
- La axila, también a examen. La zona a palpar es tanto el pecho como la parte que se dirige a la axila, teniendo que incluir esta en la palpación. Sitúa los dedos de la mano izquierda en la axila y realiza círculos para comprobar posibles masas o zonas blandas. Es muy importante que te fijes en los cambios de grosor de la piel.
- Presión en el pezón. Continua con el brazo derecho levantado, con la mano izquierda presionamos ligeramente el pezón derecho, de fuera a dentro, para comprobar que no hay líquido ni sangrado.
¡Repite el proceso con el otro pecho y listo! Si tienes dudas sobre cómo hacerlo correctamente, no dudes en preguntarnos en la farmacia.